Hacerme preguntas poderosas

¿De qué manera las preguntas pueden enriquecer mi vida?

Me gusta resolver mis dudas y preguntar. Las preguntas son mis aliadas. Preguntar es como utilizar una lupa para adentrarme a lo que simple vista me puede pasar desapercibido. Las preguntas me ayudan a abrirme a nuevas posibilidades frente a cualquier situación que se me presente. Me llevan a enterarme de más cosas mías y de la gente que me rodea. Desarrollan en mí la curiosidad intelectual. Me permiten poner a volar mi creatividad. ¡Si conociera todo el potencial que encierran mis preguntas!

El preguntar estimula mi pensamiento, me da la posibilidad de ver cosas que antes no veía, de pensar lo que nunca antes había pensado, de descubrir mis intenciones y objetivos y de tomar conciencia de que siempre hay otras opciones. Además, me ayuda a tener más claridad en lo que deseo lograr y el cómo le voy a hacer para lograrlo. 

Hay distintos tipos de preguntas. Las que me llevan a una mayor reflexión son las preguntas abiertas (que admiten respuestas variadas), en contraposición a las cerradas (cuyas respuestas son sí o no). También hay preguntas poderosas que me hacen pensar en profundidad y otras banales que el hacérmelas no me cambia en nada.

¿CUÁNDO LAS PREGUNTAS SON PODEROSAS?

• Me invitan a tomar conciencia. ¿Cómo me doy cuenta de que…?
• Me llevan a indagar. ¿Qué más puedo considerar sobre esto que nunca me había cuestionado?
• Me conectan conmigo mismo en un nivel más profundo. Y eso ¿cómo me hace sentir?
• Me brindan información valiosa. Y ¿qué me puedo decir sobre…?
• Establezco relaciones. Y esto que me digo ¿qué tiene que ver con aquello que deseo?
• Me llevan a la posibilidad de expresarme más ampliamente. ¿Qué más me gustaría agregar a lo dicho?
• Me ayudan a abrirme a opciones. ¿Qué otras posibilidades creo que pueda haber ahí? ¿Qué cosas sí puedo hacer respecto a…?
• Me motivan. ¿Por dónde voy a empezar a…? ¿Qué me daría el logro de…?
• Resaltan mis fortalezas. ¿Con qué recursos cuento para lograr eso que me propongo?
• Me llevan a explorar nuevos terrenos. ¿Qué más se me puede ocurrir respecto a…?
• Aportan más información de la que tenía. ¿Qué ganaría con…? ¿Qué obtendría al…?
• Me ayudan a cambiar. Eso que me doy cuenta, si me llevara a cambios concretos ¿a cuáles me llevaría?
• Me abren a un porvenir prometedor. ¿Cómo visualizo mi futuro respecto a…? ¿Qué beneficios me daría…?
• Me sirven para establecer una jerarquía de valores. ¿Cómo sé que esto es más importante para mí, qué esto otro?
• Me invitan a definir mis metas. ¿Qué es lo que quiero lograr con respecto a…? ¿Qué es lo que busco yo al…?
• Promueven que tenga claridad en la toma de decisiones, en los pasos a dar. ¿Cuáles acciones me encaminan en la dirección que deseo?
• Me ayudan a ponerle tiempo a lo que elijo hacer. ¿Cuándo concretamente voy a empezar a…?
• Puedo evaluar más fácilmente. ¿Cómo me voy a dar cuenta que ya lo logré?
• Me construyen nuevos significados. ¿Qué me está llamando a aprender esa experiencia?

Y todo lo anterior me ayuda a comprenderme mejor a mí mismo, a los demás, a las situaciones y a la vida misma.

Por: Lic. Alicia S. de Lamadrid (LED '82)

Desarrollo Humano, Tanatología y Coaching
Email: aliciaslamadrid@gmail.com
Twitter: @aliciaslamadrid

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