Padres de ayer y hoy

La figura del padre en la sociedad ha evolucionado y se ha ido convirtiendo en algo un tanto distinto a lo que solía ser hace apenas 30 años. Mucho más es el cambio si lo comparamos con la figura paterna de hace 50 años o más.

Los relatos de generaciones anteriores, los estudios familiares y sociológicos en libros, revistas y otros medios, resaltan esas diferencias en los padres de familia de antes y de los de ahora.

Aunque como en todo, siempre hay excepciones, es muy común que los rasgos entre los papás de una misma generación sean afines y a la vez sean distintos a las de otra.

Hace 50 años, relatan mis padres, que mis abuelos eran una autoridad fuerte, irrevocable, con una mirada firme y que "hablaba" por si sola. Los hijos acataban sus órdenes y con solo mirarlos de esa forma especial, sabían que papá estaba molesta o que debían retirarse para dejar conversar en privado con mamá u otros adultos.

El padre llegaba cansado de trabajar y todos debían atenderle, no molestarle, saludarle con respeto. Mamá advertía a los niños que nada debía perturbar a su padre pues vendría agotado. Si papá se enteraba de las travesuras o malos comportamientos de ellos, les daba una "tunda" o regañaba con voz fuerte, y con pocas palabras les decía las consecuencias que merecían.

La siguiente generación de papás, esa que a los que estamos entre los 25 y 40 años nos tocó tener, fue un poco más participativa y poco menos rígida que las anteriores. Esos padres, aún estrictos y rígidos, pero más involucrados con los hijos, compartían un poco más la crianza de estos con la madre.

Muchas veces esta participación se limitaba a la amenaza de la mamá diciendo "Van a ver cuando llegue su papá"... y la profecía se cumplía, cuando papá llegaba a casa solo escuchaba quejas, repartía regaños, mientras buscaba el sofá para descansar un poco después de un largo día de trabajo.

En algún momento dejaba a un lado los regaños para tomar un tiempo para ver con ternura a sus hijos y darles un consejo. A veces la salida era culpar a mamá y dejarle a ella toda la responsabilidad, pues al pasar más tiempo con ellos debía educarlos y corregirlos más que él. Aunque aún guardaban ciertas actitudes tradicionalistas, tenían un poco más de acercamiento con sus hijos y expectativas altas acerca de lo que podían llegar a ser, con la esperanza de que fueran mejores que él.

El padre de hoy, el que mucho más ha cambiado, es un prototipo distinto que, por voluntad propia, por la educación de casa o por las circunstancias de la vida, le ha tocado un rol más parecido al que juega la mamá en la familia.

Para bien, se ha acercado más a sus hijos. Platica, juega, y aunque esté cansado, se sienta a apoyar con las tareas escolares, pues su esposa ha llegado igual que él, después de una jornada de trabajo fuera de la casa. Para mal, es más permisivo, es casi amigo de sus descendientes, y por el mismo ajetreo de la vida, no le quedan fuerzas para ser más exigente o demandante con ellos.

Como se sabe "ausente" por tantas ocupaciones, y eso se lo reclama el mundo a través de muchos medios, erróneamente busca llenar los vacíos con cosas materiales para que sus hijos lo tengan todo, no sufran, "no les falte nada".

De vez en cuando pelea con mamá porque no acaba de aceptar que tiene que compartir con ella la autoridad, la responsabilidad del hogar y el esfuerzo por el sustento de la familia, así como el cansancio que todo esto llega a generar. Le cuesta ver como el paso de los años y generaciones han definido de forma distinta el ser padre.

Lo que si debemos tener claro es que una sociedad que cambia también reclama cambios inevitables, pero los valores deben permanecer igual. El respeto, la tolerancia, la empatía, el amor y el apoyo mutuo, deben ser constantes para no perder de vista lo más importante de ayer, hoy y siempre: Que papá es papá, que es único y es el mejor, pero sobre todo que siempre que siempre merecerá nuestro AMOR y RESPETO.

Diana Karina Corral Alanis (LED '01)
Master intervención Dificultades del Aprendizaje (ISEP/ Univ. Vic)
Certificada Maestra Bilingüe y en Inglés como segunda Lengua por TEA (Texas Education Agency)
Maestra de primaria y líder de grado en las escuelas públicas de Texas ( 5 años)
Fundadora y directora de TEKS Institute y Little Genius kindergarten (Reynosa, Tam.) desde el 2008 a la fecha.
Participante en Congresos de Trastornos del desarrollo (Espectro autista).

¿Te gusta escribir?
Te invitamos a participar en nuestra sección Artículos ExaUDEM en donde puedes compartir con el resto de la comunidad de exalumnos, tu experiencia sobre cualquier tema de interés general como desarrollo personal y profesional, educación, finanzas, negocios, tecnología, salud, etc.
Para participar solamente manda tu artículo a exaudem@udem.edu.mx.
Los artículos son publicados en nuestro sitio web, redes sociales y el Boletín ExaUDEM.
Consulta aquí algunos de los que hemos compartido.

Comentarios